La primera noche ellos se acercan y cogen una flor de nuestro jardín,
y no decimos nada.
La segunda noche ya no se esconden pisan las flores, matan nuestro perro
y no decimos nada.
Hasta que un día el más frágil de ellos entra sólo en nuestra casa,
nos roba la luna,
y conociendo nuestro miedo
nos arranca la voz de la garganta.
Y porque no dijimos nada
ya no podemos decir nada...
Vladimir Maiakovski.
¿Será ultraje leer en el baño? ¿Y los que como Hemingway tienen hasta un librero en el baño? ¿Y los que se han limpiado con el Granma? No van a dar abasto los juicios a los ultrajadores... O será que el delito es que se sepa?
Para que los que quieren impartir una "justicia" tajante donde "la dignidad de la bandera" es mayor que la de un hombre que la defiende, vean el rostro, escuchen la voz, aquilaten el carácter, de a quien sin conocer ni comprender, querían silenciar y desprestigiar. Ante muchas cosas pasadas y porvenir, repito esta enseñanza: "El sábado se hizo para el hombre, y no el hombre para el sábado." (Marcos 2:27:28). Lo demás es fariseísmo, el facilismo de las formas sobre las esencias. https://www.facebook.com/elestornudo/videos/530516271231862/
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